NUEVA LEY LOMCE

Cuando termine el trámite parlamentario, la Lomce se convertirá en la séptima reforma educativa de la democracia. El objetivo del Gobierno es que esté aprobada en otoño para que se pueda cumplir el plazo preceptivo de diez meses para la adaptación curricular y empiece a aplicarse en el curso 2014-2015, dos años después de su presentación. Según el ministro de Educación, José Ignacio Wert, se trata de un “cambio fundamental” en el sistema educativo en España, destinado a reducir los altos niveles de fracaso escolar (tenemos una tasa de abandono escolar del 24,9 por 100, cuando la media de la Unión Europea es del 13 por 100), mejorar la empleabilidad de los jóvenes y disminuir la dispersión del sistema, mediante "un cambio de filosofía" en la distribución de competencias entre el Estado y las comunidades autónomas. Los principales cambios que prevé la Lomce: Evaluaciones al final de cada etapa. Habrá pruebas de capacitación, iguales en todo el Estado, al final de cada etapa: en Primaria, la ESO y el Bachillerato o FP. Los exámenes de ESO y Bachillerato tendrán efectos académicos, es decir, será necesario aprobarlos para obtener títulos de Graduado en ESO y de Bachillerato. La prueba externa de Primaria, sin embargo, servirá "para la señalización del cumplimiento de aprendizajes", según explicó José Ignacio Wert, que ha dicho que estos exámenes no son “reválidas”, sino “caminos de señalización”. Prueba en 3º de Primaria. Se hará para la detección precoz de problemas de aprendizaje en los alumnos. Se adelantan los itinerarios. En 3º de la ESO los niños se orientarán hacia la Formación Profesional o el Bachillerato a través de asignaturas optativas, y tendrán que elegir ya Matemáticas orientadas a enseñanzas académicas o aplicadas. Las dos vías estarán diferenciadas en 4º de la ESO. Repetir curso. Se podrá pasar de curso con dos suspensos, como hasta ahora, salvo si se suspenden a la vez lengua y matemáticas. División de asignaturas en troncales, específicas y de libre configuraciónautonómica. La idea es garantizar "un núcleo básico homogéneo" de los contenidos en todas las comunidades. En las asignaturas troncales, el Estado definirá completamente los contenidos; en las específicas fijará unos contenidos mínimos y los criterios de evaluación y en las de libre configuración la comunidad autónoma establecerá completamente el contenido, igual que en la enseñanza de las lenguas cooficiales. Castellano como lengua vehicular. Para garantizar la posibilidad de estudiar en castellano en las comunidades con lengua autonómica cooficial, el proyecto de ley establece que el Estado adelantará el dinero para que los alumnos que deseen esta opción asistan a colegios privados si no tienen oferta pública en este idioma. El Gobierno descontará ese gasto después a la comunidad autónoma (la medida afecta a Cataluña). Calcula un coste de cinco millones de euros (el 21% del presupuesto para la reforma el primer año) para una hipótesis de mil alumnos. Educación para la Ciudadanía. Desaparece como asignatura y sus contenidos se integran de manera transversal en otras asignaturas, en contra de la recomendación del Consejo de Estado. Religión y alternativas. La asignatura de Religión y sus asignaturas alternativas, -Valores Culturales y Sociales en Primaria y Valores Éticos en Secundaria- serán serán evaluables y la nota contará para la media del curso y a la hora de solicitar becas. Además, serán optativas desde Primaria, de manera que los alumnos puedan cursar las dos si así lo desean. Colegios segregados. Se ha introducido una cláusula según la cual los centros en los que se separa a niños y niñas que soliciten financiación pública tendrán que justificar que su modelo es tan aceptable como el mixto. Formación Profesional. Se crea una FP básica de dos cursos para alumnos de segundo o tercero de la ESO, a partir de los 15 años, que tengan dificultades para seguir la enseñanza convencional. Quienes estudien esta vía podrán optar al título de la ESO y adquirir una cualificación profesional mínima. Habrá un cambio en los bloques de asignaturas para garantizar la homogeneidad en todas las comunidades autónomas. Acceso a la Universidad. El título de bachiller será suficiente para acceder a la Universidad, pero cada centro universitario podrá hacer sus propias pruebas de acceso y valorar otra formación complementaria.